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Los vaivenes del H.C.D.: ¿ESTÁN NERVIOSOS LOS EDILES?
El comienzo de la discusión sobre el aumento de las tasas generales fue la primera prueba de fuego para la nueva gestión comunal que no logró superar con facilidad, ya que algunos concejales dejaron en claro que no están de acuerdo con el incremento indicado desde el Ejecutivo, mientras que otros estarían dispuestos a votar positivamente la ordenanzas Fiscal y Tributaria para “facilitar” la gestión del Intendente Sujarchuk durante el año que está a punto de comenzar.
El cierre de la jornada legislativa de la semana pasada dejó en evidencia que en el Concejo Deliberante hay un frágil y delicado equilibrio de fuerzas que podría ser afectado por otros factores.
En una suerte de calma que precede a la tormenta, por los pasillos de HCD crece el clima de esas diferencias fogoneado por reclamos de algunas promesas de campaña que no se estarían cumpliendo. A esto se le sumaría el malestar y la desconfianza de algunos concejales, incluso del mismo espacio peronista.
Uno de los más disconformes sería Jorge “Acero” Cali, que ya mostró los dientes cuando el Ejecutivo quiso imponer un aumento de las tasas que orillaba el 60%. Una discusión que sigue a puertas cerradas.
Y si faltaba algún ingrediente para la tormenta que se avecina. En menos de 24 horas la renuncia de dos secretarios del Ejecutivo comunal pone en riesgo la continuidad a los proyectos anunciados con bombos y platillos al momento de la asunción del actual jefe comunal.
Sujarchuk reconoció públicamente que recibió “un municipio prolijo y ordenado, a diferencia de lo que paso en otros distritos” según sus propias palabras.
En ese orden de ideas, un documento oficial, al que tuvo acceso escobarnews.com, refleja que al momento en que Sandro Guzmán entregó el mando al nuevo Jefe comunal, la Municipalidad tenía sus cuentas saneadas y contaba con un notorio superavit que hasta tenía prevista una partida de $40 millones para el alumbrado público.
Pero volviendo al Concejo Deliberante, el oficialismo escobarense podría enfrentar denuncias, de acuerdo a testimonios de algunos concejales opositores.
La investigación estaría siendo llevada adelante por el Frente Cambiemos. En las últimas horas habría habido cruces telefónicos, testimonios de concejales y mayores contribuyentes que, coincidentemente, se podrían definir como un delito extorsivo: en algunos casos se hablaría de intimidación; y en otros, ofrecimientos de grandes sumas de dinero exigiendo acciones que “podrían estar en clara oposición a los deberes y compromisos que debe asumir un concejal para con los vecinos”.
Ante esta situación, Jorge Cali habría generado “una revolución” con sus equipos técnicos, según señalaron fuentes consultadas.
Por lo pronto, habrá que esperar hasta el martes venidero para ver si tantos rumores terminan siendo una simple lluvia de verano o si se trata de una tormenta perfecta.
LA REVISTA y la Comunidad
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